Los mapas de El Altar Blanco

LOS MAPAS DE EL ALTAR BLANCO

Como complemento a El Altar Blanco se incluyen dos mapas, uno que esboza esquemáticamente el valle de Vacamuerta y otro mucho mayor que abarca toda la región de los Confines, el lugar donde se desarrollará la saga.

Élimbar y Vacamuerta

Este es el mapa que Laudia dejó caer en la entrada y posteriormente encontró Serian. Es una vista cenital del valle de Vacamuerta, con Élimbar en el centro.


La fortaleza de Élimbar está situada en el centro-izquierda, con las torres y el Torreón destacados y el Scriptorium como edificio anexo, al norte. Frente a él se encuentra el lago, y más al sur, donde la colina se acerca a la orilla, está la atalaya semiderruída que guarda la entrada sur, la misma en la que Lúdor solía escabullirse.

Estaurón, la espada que Rogen otorgó como premio, se encontraba en la cima más cercana a las almenas, a la vista de todo el mundo.

Al otro lado del lago se encuentra el altar, aislado y más cerca del bosque que del propio Élimbar. Justo debajo se indica la dirección en la que se encuentran Las Montañas, habitadas por los cárnax, amenazando constantemente la fortaleza.

En la esquina superior izquierda se indica "al valle de los ganaderos", donde Vacamuerta termina y comienzan otros valles similares, habitados por los pastores que rinden tributos a Rogen, Mayor de la Casa de Urci y Señor de Élimbar. En la esquina inferior izquierda, hay una flecha que indica la orientación, señalando la dirección por la que sale el sol con una "N" de "Naciente", como es costumbre en las Cuatro Tierras.

El lago se encuentra en una depresión natural, siendo la parte más baja del valle, con elevaciones alrededor, desde la más grande sobre la que se apoya Élimbar hasta las más pequeñas, al otro lado del valle, pasando por las quebradas escarpadas del sur, que anuncian la dirección en la que se levantan Las Montañas.

Los Confines

En este otro mapa, mucho más elaborado, podemos ver la región de los Confines, también conocida como las Cuatro Tierras, debido a que está conformada principalmente por cuatro regiones.


Como veis, tiene muchos más detalles y abarca más territorio que los necesarios para el argumento de El Altar Blanco, que va desde Carvaria hasta Élimbar, pues está pensado para servir de referencia a la saga completa, no solo al primer volumen.

Las Cuatro Tierras referidas son Estura, al norte de las montañas; Ílion, al sur, desde las ruinas de la ciudad homónima hasta la ciudad de Greda; Vardia, que corre paralela a Ílion y llega hasta Lahoz y la Tierra de los Castros; y Cale, que abarca toda la costa occidental, desde los puertos al norte de Aramar hasta Quívitas.

Además, existen otras regiones de menor importancia que ya están señaladas: la ya mencionada Tierra de los Castros, alrededor de ese macizo montañoso, Sirra, corriendo paralelo y abrazando las ciudades de El Paso y Greda por el sur, y la lejana región de Ibrús, al sur del Santuario de Lurgaic.

Conforme a las catorce Casas de los Confines, me limitaré a señalar su posición aproximada y las ciudades que pertenecen a cada cual, para no adelantar nada más que lo estrictamente necesario.

La Casa de Roy tiene su mayorazgo en Árica, y están bajo su dominio Setena y la propia Carvaria, además de todos los pueblos de alrededor. Las ruinas de Ílion también están en su territorio, aunque ya no hay nadie que se atreva a vivir cerca de ellas. La Casa de Ferrantia domina Fengal, Úrbica y llega casi hasta El Paso, asentamiento que rinde pleitesía a la Casa de Carbos, con sede en Greda. Al norte de Greda se encuentra la ciudad de Turma de los Caballeros, principal población de la Casa de Alvar.

Al este, Lahoz es la mayor ciudad de la Casa de Dalva, e Iltir el asentamiento principal de la de Írrica, que se extiende alrededor de toda la región montañosa. Al norte, Arn es la capital de la Casa de Leiva, siendo Lurgaic un santuario independiente, situado en la frontera entre la Casa de Leiva y la de Lezo, esta última con capital en Fedia. Como ya se explica en el primer libro, Élimbar es la sede de la Casa más pequeña de todas, la Casa de Urci, regida por el señor Rogen.

Ya en Estura, Abiés y Victania son las cabezas de la Casa de Arcos, residente en la primera de ellas. Keltar es el señorío más occidental de todos, orientada al mar y con el mayorazgo en la antiquísima Luca, con Aramar como segunda ciudad. Por último, al sur de Keltar se encuentra la Casa de Escipia, con la ciudad de Corata, al norte, y Quívitas, al sur, como mayorazgo.

Todas las ciudades tienen una razón de ser, un origen y una historia, pero la de las catorce Casas y de todo lo que sucedió desde la Noche Oscura hasta los acontecimientos narrados en la saga merecen un libro aparte.